¿Por qué se cayó Facebook?
¿Qué pasó con Facebook?
Para responder esta primera pregunta te contaré un par de historias como la de Valentina, una emprendedora que tiene un negocio de desayunos sorpresa y también vende ropa importada.
En ambos negocios ella utiliza Instagram como la plataforma para promocionarlos y Whatsapp como el medio por el cual sus clientes le realizan los pedidos.
También voy a contarte la historia de Hector, un emprendedor peruano cuya startup depende 100% de la publicidad de Facebook para la generación de clientes.
Y por último la historia de Victoria, una señora de 67 años que tiene todos sus hijos en el exterior y que su único medio para comunicarse con ellos es Whatsapp.
Valentina, Hector y Victoria se suman a los más de 3.5 billones de personas que alrededor del mundo son usuarios de alguna de las aplicaciones de Facebook.
Todos ellos, el día lunes 4 de octubre del 2021 sobre las 11:40 A.M. (hora Colombia) se encontraron con la sorpresa de que la familia de aplicaciones de Facebook, que incluyen Instagram, Whatsapp y Oculus, dejaron de funcionar. Y estuvieron por fuera alrededor de 5 horas.
Este falló representó un trastorno para las comunicaciones y negocios de millones de personas en el mundo. Con el agravante de que existen países como Birmania o India donde para sus habitantes usar Facebook es sinónimo de usar Internet.
Y sin tener en cuenta todas las personas que usan Facebook para iniciar sesión en otras plataformas como tiendas de compras o dispositivos como televisores inteligentes se quedan sin acceder a ellos durante las horas que duró el fallo.
Pero, ¿qué fue lo que falló?
Antes de responder a esta segunda pregunta voy a contarte un par de historias más, primero la historia de Kelly, una manager de Facebook que durante ese mismo día no pudo acceder a las oficinas porque su carnet digital dejó de funcionar también.
Y ¿qué tal? la historia de Robert, un desarrollador de software de Facebook que recibió la llamada urgente de una de las directivas de la empresa pidiéndole que resolviera el problema pero se dió cuenta que era imposible realizar un diagnóstico o solucionarlo porque no se podía acceder tampoco a los sistemas internos de la empresa.
Es decir el fallo fue tan complicado que para los propios ingenieros de la compañía fue imposible acceder al sistema, mucho menos solucionarlo. E incluso muchos de ellos se quedaron por fuera de las oficinas al no poder acceder.
Facebook es una empresa en la que todos los sistemas de almacenamiento de datos, correos electrónicos, e incluso tecnologías de acceso a las oficinas se corren dentro de los mismos sistemas de la empresa.
Ahora sí, ¿Por qué se cayó Facebook?
Facebook emitió un comunicado el martes confirmando que la causa de la interrupción fue un cambio de configuración en los enrutadores de la red troncal que coordinan el tráfico de red entre los centros de datos de la empresa, lo que tuvo un efecto en cascada y paralizó todos los sus servicios.
Para explicarlo un poco mejor me basaré en una explicación un poco más detallada que proporcionó Cloudflare, una empresa de infraestructura y seguridad de sitios web que hace poco tuvo sus propios problemas de interrupción con Internet.
Su explicación involucra dos conceptos que hacen del Internet lo que es Internet, se trata de Domain Name System (DNS) y Border Gateway Protocol (BGP).
DNS es lo que permite a los usuarios conectarse a sitios web usando nombres de dominio en vez de direcciones IP, es básicamente el directorio telefónico de Internet.
Y como Internet es una cantidad inmensa de redes interconectadas, para mantener el orden necesitas algo como BGP, un sistema que te diga a dónde debe ir cada señal.
Es decir, DNS es esencialmente el sistema de direcciones para la ubicación de cada sitio web, su dirección IP, mientras que BGP es la hoja de ruta que encuentra la forma más eficiente de llegar a esa dirección IP.
De esta manera, Cloudflare explica que lo que sucedió con Facebook ese lunes fue en términos sencillos como haberle dicho a BGP, a través de una serie de actualizaciones, que esos caminos a Facebook ya no existían. Y no solo para Facebook, sino para todo lo que Facebook ejecuta.
Eso significaba que las personas que intentaban llegar a Facebook no podían encontrar el camino para acceder a él.
Y ¿ por qué tardó tanto en solucionarse?
Como te mencionaba en la historia de Kelly y Robert, el personal de Facebook no pudo acceder a su propia plataforma de comunicaciones, y nisiquiera a su oficina debido a que el sistema de pase de seguridad se vio afectado por la interrupción.
Y dado que Facebook ejecuta TODO a través de sus propios sistemas, entonces la forma habitual en la que se soluciona un problema como este tampoco funcionaba.
Facebook indicó que la duración y la gravedad de la interrupción se debían a que los sistemas estaban volviendo a su capacidad máxima lentamente. Sin embargo no ha dado muchos detalles sobre lo que salió mal y cómo se solucionó.
Por lo cual tendremos que imaginarnos una historia más, esta vez la de Peter, quien hace parte de un grupo elite de ingenieros que fue enviado a sus servidores en California para restablecer manualmente los servidores donde se originó el problema. Y resultaron ser los héroes de la jornada.
¿Qué implicaciones tiene esto?
Mucha gente está preocupada por lo que este fallo puede significar para la protección de sus datos personales, y frente a eso Facebook declaró no tener evidencia de que los datos del usuario se hayan visto comprometidos como resultado de este tiempo de inactividad.
Es decir, es probable que tus datos personales estén más en riesgo ahora que Facebook está encendido, que mientras estuvo apagado.
Pero esto no quiere decir que no hubo personas afectadas con el daño, como te lo muestro en post, detrás de una aplicación hay millones de personas, millones de vidas. Entre trabajadores de la empresa, personas cuyos negocios dependen en algo de sus aplicaciones, o familias que se comunican a través de ellas.
Por eso, lo sucedido el 4 de octubre de 2021, más que un fallo de una plataforma, debería significar para todos nosotros un cambio en nuestra forma de ver Internet.
Ahora que vimos lo vulnerables que estos gigantes pueden ser, es un buen momento para pensar en alternativas de comunicación y para nuestros negocios; es momento también de generar soluciones alternativas y descentralizadas.
Si tu que me lees estás trabajando en alguna de estas soluciones, es pertinente contarte una última historia:
La historia de Liliana, Isabel y Natalia unas emprendedoras colombianas que creen en la importancia de las personas detrás de cualquier tecnología y que lideran un equipo de personas que apuestan por mejorar la calidad de los productos de software de la región a través de pruebas de software.
Si te interesa conocer más de nosotros o nuestros servicios, contáctanos.